sábado, 13 de noviembre de 2010

EL ABORTO INDUCIDO o PROVOCADO:
El aborto puede ser espontáneo o provocado. El espontáneo se produce o bien porque surge la muerte intrauterinamente, o bien porque causas diversas motivan la expulsión del nuevo ser al exterior, donde fallece dada su falta de capacidad para vivir fuera del vientre de su madre. Si el aborto es provocado, se realiza o bien matando al hijo en el seno materno o bien forzando artificialmente su expulsión para que muera en el exterior
El aborto inducido o provocado es la interrupción deliberada del embarazo mediante la extracción del feto de la cavidad uterina. En función del periodo de gestación en el que se realiza, se emplea una u otra de las cuatro intervenciones quirúrgicas siguientes: la succión o aspiración puede ser realizada durante el primer trimestre (hasta la duodécima semana). Mediante el uso de dilatadores sucesivos para conseguir el acceso a la cavidad uterina a través del cérvix (cuello del útero), se introduce un tubo flexible conectado a una bomba de vacío denominado cánula para extraer el contenido uterino.
Puede realizarse en un periodo de tiempo que va de cinco a diez minutos en pacientes no internadas. A continuación se introduce una legra (instrumento metálico en forma de cuchara) para eliminar por raspado cualquier resto de las cubiertas uterinas. El método de aspiración, introducido en China en 1958, pronto sustituyó al método anterior de dilatación y legrado (en el que la legra se utilizaba para extraer el feto). Durante la primera parte del segundo trimestre la interrupción del embarazo se puede realizar por una técnica especial de legrado-aspiración combinada a veces con fórceps, denominada dilatación y evacuación (DE).
La paciente debe permanecer ingresada en el hospital puesto que puede haber hemorragias y molestias tras la intervención. A partir de la semana 15 de gestación el método más empleado es el de infusiones salinas. En esta técnica se utiliza una aguja hipodérmica o un tubo fino para extraer una pequeña cantidad de líquido amniótico del útero a través de la pared abdominal. Este líquido es sustituido lentamente por una solución salina concentrada al 20%. Entre 24 y 48 horas empiezan a producirse contracciones uterinas, que producen la expulsión del feto y la paciente puede abandonar el hospital uno o dos días después. Los abortos tardíos se realizan mediante histerotomía: se trata de una intervención quirúrgica mayor, similar a la cesárea, pero realizada a través de una incisión de menor tamaño en la parte baja del abdomen. Como alternativa a estos procedimientos, existe una píldora denominada RU-486 que bloquea la hormona progesterona y es eficaz en los primeros 50 días de gestación. La RU-486 se desarrolló en Francia y en 1988 se legalizó su uso.
Los abortos del primer trimestre son relativamente sencillos y seguros cuando se realizan en condiciones clínicas adecuadas. Los riesgos de complicaciones aumentan de manera paralela a la edad de la gestante y consisten en infecciones, lesiones del cuello uterino, perforación uterina y hemorragias. Hay situaciones clínicas concretas en las que un aborto inducido, incluso tardío, supone menor riesgo para la paciente que la terminación del embarazo.
RU486 es una nueva forma de terminar un embarazo usando medicamento en vez de tener cirugía. Se debe hacer las primeras siete semanas después de su último periodo menstrual. Actualmente hay varios tipos de medicamentos usados por los centros clínicos en los Estados Unidos. Uno de estos medicamentos es las pastilla RU486 (Mifepristone) y el otro es la inyección de MTX (Methotrexate).  Debe ir a un centro clínico para que le den la primera pastilla o inyección.  Unos días después, tendrá que tomar otro medicamento que causará la contracción del útero y ayudará que salga la secreción vaginal. Dentro de una semana empezará a sangrar como sí tuviera su periodo menstrual.  Es posible que sienta colicos mentruales, cansancio o náusea. Tendrá que regresar al centro clínico en dos semanas para consultar el médico y asegurase que todo haya ido bien.
Desde que momento se puede decir que existe un ser humano?: Desde que se produce la fecundación mediante la unión del espermatozoide con el óvulo, surge un nuevo ser humano distinto de todos los que han existido, existen y existirán. En ese momento se inicia un proceso vital esencialmente nuevo y diferente a los del espermatozoide y del óvulo, que tiene ya esperanza de vida en plenitud. Desde ese primer instante, la vida del nuevo ser merece respeto y protección, porque el desarrollo humano es un continuo en el que no hay saltos cualitativos, sino la progresiva realización de ese destino personal. Todo intento de distinguir entre el no nacido y el nacido en relación con su condición humana carece de fundamento.
Las Causas del aborto.
El principal problema del aborto es psicológico y es el miedo:
Miedo por falta de capacidades económicas para alimentar al hijo.
Este temor se debe a la falta de confianza en Dios ya que lo más bello y lo más querido para una madre es su propio hijo.
Desafortunadamente ésta sociedad de consumo y de falsos valores en que vivimos, ha desvalorizado al niño que debe venir a éste mundo y con su racionalismo ha creado un falso temor. Veamos un gran ejemplo: Kay James, directora de relaciones públicas para el MOVIMIENTO PROVIDA en Estados Unidos habla de una mujer de color terriblemente pobre, abandonada por su marido alcohólico, que tuvo su cuarto bebé sobre una mesa "ese bebé era yo", dice la Sra. James graduada de la Universidad y madre de 3 niños.
Miedo a lo que digan sus padres o las demás personas.
(Cuando la joven es embarazada durante el noviazgo). Realmente los conceptos y los razonamientos humanos, de padres o terceras personas ante las leyes de Dios, no deben impedir que venga una criatura a éste mundo. La vida la dá Dios y Dios está por encima de todo concepto.
"Yo iba a ser el séptimo hijo y mi madre estaba decidida a no dejarme nacer. Entonces sucedió algo maravilloso. Mi tía la hizo cambiar de opinión y así me fué permitido nacer. Se puede decir que soy un milagro". Arthur Rubenstein, pianista.
Miedo a los 9 meses de embarazo y al dolor del parto.
Realmente la misión más grande de toda mujer, es ser madre y traer hijos al mundo. Si los animales que son irracionales no se niegan este derecho

sábado, 30 de octubre de 2010

PIENSA ANTES DE

Cuantas mujeres habrán muerto hoy en nuestro país por un aborto mal realizado en sitios sin ninguna medida higiénica y por personas que han hecho de la medicina una práctica sin escrúpulos, solamente con el único objetivo del lucro económico. La legalización total del aborto tiene que ser una medida que permita a la mujer tener el derecho de decidir lo que considere mejor para su vida. Hoy con la despenalización de aborto para hechos de violación, malformidades congénitas o peligro inminente de muerte de la Madre se ha avanzado en alguna medida, pero hace falta todavía la despenalización total, que permitiría una adecuada atención a la mujer que se quiera practicar un aborto. Se acabaría con ese comercio de las clínicas clandestinas y las malas prácticas médicas en la realización de abortos. La Constitución y el ordenamiento Jurídico protege a la mujer en sus derechos y deberes en total igualdad con el hombre, esto se debe plasmar en la realidad social de permitirle el derecho a su intimidad y a la decisión propia de tener o no un hijo. Estas medidas deben ir unidas a campañas sobre el conocimiento de los diversos métodos de planificación y una verdadera educación en valores y a nivel sexual en todos los grados de educación. Así llegaríamos a observar que el aborto siendo legal no sería necesaria su práctica por la misma decisión de la mujer. Lo fundamental es respetar el derecho de la mujer a sus decisiones y a su intimidad factores definitivos para una buena convivencia social.

DEJALO VIVIR ELLOS TAMBIEN TIENEN DERECHO A LA VIDA

"Madre, ¿me escuchas? tengo la voz muy débil.
Te hablo desde la cárcel, en esta cárcel de cristal
donde sólo soy un punto pero tengo corazón.
Mamá, ¿qué ocurre? oigo tu corazón gritar,
no hagas eso que pretendes, no lo hagas, por favor.
Aun no me has escuchado y ya me quieres callar,
aun no me has visto y ya me quieres cegar,
dame la vida en silencio.

¿Qué motivos tienes para querer abortar?

Ya sé que no tendré padre, eso ya lo sé mamá.
Pero dame tú la vida, no me vayas a matar.
Me sentiré orgulloso de llamarte mamá,
te abrazaré con mis brazos y te diré que te quiero.
Pero si tú lo decides no podré hacerlo.
Déjame crecer en esta cárcel de cristal.
Tu sangre empieza a invadirme, tengo ansias de vivir,
y creciendo junto a ti seguro seré feliz..."

Y al poco tiempo de esto alguien se puso a llorar,
cuando de pronto se escuchó:
"Adiós, ya me voy, mamá"

LEMA: La vida, aunque dura, es bonita: deja vivir.

viernes, 15 de octubre de 2010

EL ABORTO

REFLEXION SOBRE EL ABORTO
Con un bebe de brazos, una mujer muy asustada llega al consultorio de su ginecólogo y le dice:Doctor: por favor ayúdeme, tengo un problema muy serio.
Mi bebé aún no cumple un año y ya estoy de nuevo embarazada.
No quiero tener hijos en tan poco tiempo, prefiero un espacio mayor entre uno y otro....
El médico le preguntó: Muy bien, ¿qué quiere que yo haga?
Ella respondió:
Deseo interrumpir mi embarazo y quiero contar con su ayuda.
El médico se quedó pensando un poco y después de algún tiempo le dice: Creo que tengo un método mejor para solucionar el problema y es menos peligroso para usted.
La mujer sonrió, pensando que el médico aceptaría ayudarla.
Él siguió hablando: Vea señora, para no tener que estar con dos bebés a la vez en tan corto espacio de tiempo, vamos a matar a este niño que está en sus brazos.
Así usted tendrá un periodo de descanso hasta que el otro niño nazca.
Si vamos a matar, no hay diferencia entre uno y otro de los niños.
Y hasta es más fácil sacrificar éste que usted tiene entre sus brazos puesto que usted no correrá ningún riesgo.
La mujer se asustó y dijo: ¡No, doctor! ¡Qué horror! ¡Matar a un niño es un crimen!
También pienso lo mismo, señora, pero usted me pareció tan convencida de hacerlo, que por un momento pensé en ayudarla.
El médico sonrió y después de algunas consideraciones, vio que su lección surtía efecto.
Convenció a la madre que no hay la menor diferencia entre matar un niño que ya nació y matar a uno que está por nacer, y que está vivo en el seno materno