sábado, 30 de octubre de 2010

PIENSA ANTES DE

Cuantas mujeres habrán muerto hoy en nuestro país por un aborto mal realizado en sitios sin ninguna medida higiénica y por personas que han hecho de la medicina una práctica sin escrúpulos, solamente con el único objetivo del lucro económico. La legalización total del aborto tiene que ser una medida que permita a la mujer tener el derecho de decidir lo que considere mejor para su vida. Hoy con la despenalización de aborto para hechos de violación, malformidades congénitas o peligro inminente de muerte de la Madre se ha avanzado en alguna medida, pero hace falta todavía la despenalización total, que permitiría una adecuada atención a la mujer que se quiera practicar un aborto. Se acabaría con ese comercio de las clínicas clandestinas y las malas prácticas médicas en la realización de abortos. La Constitución y el ordenamiento Jurídico protege a la mujer en sus derechos y deberes en total igualdad con el hombre, esto se debe plasmar en la realidad social de permitirle el derecho a su intimidad y a la decisión propia de tener o no un hijo. Estas medidas deben ir unidas a campañas sobre el conocimiento de los diversos métodos de planificación y una verdadera educación en valores y a nivel sexual en todos los grados de educación. Así llegaríamos a observar que el aborto siendo legal no sería necesaria su práctica por la misma decisión de la mujer. Lo fundamental es respetar el derecho de la mujer a sus decisiones y a su intimidad factores definitivos para una buena convivencia social.

DEJALO VIVIR ELLOS TAMBIEN TIENEN DERECHO A LA VIDA

"Madre, ¿me escuchas? tengo la voz muy débil.
Te hablo desde la cárcel, en esta cárcel de cristal
donde sólo soy un punto pero tengo corazón.
Mamá, ¿qué ocurre? oigo tu corazón gritar,
no hagas eso que pretendes, no lo hagas, por favor.
Aun no me has escuchado y ya me quieres callar,
aun no me has visto y ya me quieres cegar,
dame la vida en silencio.

¿Qué motivos tienes para querer abortar?

Ya sé que no tendré padre, eso ya lo sé mamá.
Pero dame tú la vida, no me vayas a matar.
Me sentiré orgulloso de llamarte mamá,
te abrazaré con mis brazos y te diré que te quiero.
Pero si tú lo decides no podré hacerlo.
Déjame crecer en esta cárcel de cristal.
Tu sangre empieza a invadirme, tengo ansias de vivir,
y creciendo junto a ti seguro seré feliz..."

Y al poco tiempo de esto alguien se puso a llorar,
cuando de pronto se escuchó:
"Adiós, ya me voy, mamá"

LEMA: La vida, aunque dura, es bonita: deja vivir.

viernes, 15 de octubre de 2010

EL ABORTO

REFLEXION SOBRE EL ABORTO
Con un bebe de brazos, una mujer muy asustada llega al consultorio de su ginecólogo y le dice:Doctor: por favor ayúdeme, tengo un problema muy serio.
Mi bebé aún no cumple un año y ya estoy de nuevo embarazada.
No quiero tener hijos en tan poco tiempo, prefiero un espacio mayor entre uno y otro....
El médico le preguntó: Muy bien, ¿qué quiere que yo haga?
Ella respondió:
Deseo interrumpir mi embarazo y quiero contar con su ayuda.
El médico se quedó pensando un poco y después de algún tiempo le dice: Creo que tengo un método mejor para solucionar el problema y es menos peligroso para usted.
La mujer sonrió, pensando que el médico aceptaría ayudarla.
Él siguió hablando: Vea señora, para no tener que estar con dos bebés a la vez en tan corto espacio de tiempo, vamos a matar a este niño que está en sus brazos.
Así usted tendrá un periodo de descanso hasta que el otro niño nazca.
Si vamos a matar, no hay diferencia entre uno y otro de los niños.
Y hasta es más fácil sacrificar éste que usted tiene entre sus brazos puesto que usted no correrá ningún riesgo.
La mujer se asustó y dijo: ¡No, doctor! ¡Qué horror! ¡Matar a un niño es un crimen!
También pienso lo mismo, señora, pero usted me pareció tan convencida de hacerlo, que por un momento pensé en ayudarla.
El médico sonrió y después de algunas consideraciones, vio que su lección surtía efecto.
Convenció a la madre que no hay la menor diferencia entre matar un niño que ya nació y matar a uno que está por nacer, y que está vivo en el seno materno